Wednesday, October 19, 2005

En Merida

Luego de 12 horas de largo viaje en autobuses de la universidad, con gente que no se comportaba (y NINGUNO era conocido mío, al menos para conversar) llegué a Mérida para asistir al Segundo Congreso Binacional de Educación. Durante el camino recordé a dos personas: a Trippis, porque en el autobús sonó incesantemente el top 5 de la Salsa Erótica Sádica que ella describió en este post; y a Hombre Lobo, porque estoy seguro que las condiciones del viaje no hubieran sido de su agrado, así como no fueron del mío. Hubiera sido interesante ver sus impresiones de un viaje así.

Lo bueno es que al menos me alejo por un par de días de la psicosis que nos tienen con la tesis en la universidad. Ando con poco tiempo y no es mucho lo que tengo que acotar. Al volver estaré poniendo alguna foto.

Una recomendación: No hagan viajes largos con la gente de sus universidades, por su salud mental.

8 comments:

Brakewing said...

Que bueno que estas de regreso!
Saludo!

administrador said...

Epale!
Bueno yo no puedo decir lo mismo, ya que las veces que he viajado con la gente de la universidad yo soy unos de los que van hablando paja a todo volumen. Eso si no me meto con los que van durmiendo, me explico no les hago bromas, ni los pinto, ni les afeito las cejas, ni ninguna otra cosa por el estilo, pues me parecen juegos muy pesados. Lo mio es hablar y hechar cuentos y chistes, algo sano.

Kareta said...

Chamo no puede ser, yo hice par de viajes con la gente de mi universidad y fue lo mejor del mundo, fui precisamente a unos congresos que organizó la gente de la ULA y la pasé de maravilla y eso que nos fuimos en los autobuses de la central que te dejan la espalda hecha polvo. Me hiciste recordar muchas cosas, que días aquellos!!!

Hombre Lobo said...

Cada vez que pienso en la posibilidad de tomar un autobús de más de 6 horas con aquella pandilla de sub-normales con los que veía clases (no todos, pero la mayoría) me entra un escalofrío. Afortunadamente siempre tuve el suficiente criterio como para evitarlo (mejor dicho: nunca se dio la oportunidad y lo agradezco). Sin embargo, tampoco es que los viajes largos en autobús sean agradables de por sí. Recuerdo que una vez me tocó sentarme del lado de la ventana, aplastado por la omnipresencia de un gordo de hombros anchos que para colmo andaba vestido de traje, por lo que la monopolización del espacio era total. Y ni hablar de cuando quieres dormir y te clavan una película a toda mecha, que por lo general es alguna de esas típicas de "Radio Caracas domingo por la tarde". Dios mío, tengo tantas historias de horror con los autobuses que creo que me está dando algo.

Protheus said...

Stephen King jamás tuvo una pesadilla igual: en 5º año de bachillerato- sospecho que hicimos algo MUY malo- nos mandaron, a los dos quintos años, a un viaje de horror a Falcón, con nuestra profesora de Ciencias de la Tierra, quien no planificó logística ni visita alguna, por lo cual nos quedamos en el Pío XII, de Coro, unos 50 pre-delincuentes juveniles testosteronizados, en Semana Santa, con una profesora inepta, su consorte, y un sacerdote, el único hueso sano en millas a la redonda. Hambre, marihuana, peleas, fugas y hasta unos compañerso que "se dejaron caer" en el Colegio con unas mujeres "alegres" en un Mercedes Benz...
Tengo historias para iluminar la Eternidad, pero esta fue un apagón.

Petrusco said...

Jejeje, paciencia y aguante. Vacílatelo como si fuera una película de Tarantino o una escena de la Naranja Mecánica

me said...

Yeh, lo más lejos que he llegado con gente de la universidad es a oriente.
LUZ.Maracaibo/UDO.Anzoátegui para estar más claros.

Imaginate a un viaje (muchos) maracuchos, por tiempo prolongado en un BUS. La echadera de chistes y la cantadera no era normal. Dormí poco, comí mucho. La pasé muy bien. Es necesario aprovechar estas experiencias mientras nos lo permite nuestra vida universitaria.

Depeco said...

en momentos como ese... la recomendación es una sola... dormir!!!!!

Un besote y que bien que ya regresaste!!!