Sirva este primer post para desearles feliz 2010 a todos, al menos a los amigos que aún siguen pasando por acá. Espero que las festividades pasadas hayan sido ocasión para el reencuentro con sus seres queridos y celebración.
Ya en esta fecha, lo que queda es limpiar la casa y guardar los cachivaches decembrinos, hasta este próximo diciembre, donde la historia se repite. Para los afortunados que no comienzan a trabajar el próximo 04 de enero, aprovechen los días libres.
Nunca lo había comentado acá, pero mi familia comienza el año de una manera particular. Luego de celebrar la llegada del año, joder y dormir un poco, vamos en la mañana al cementerio. No, no somos de los que recibimos el año allá, ni locos, aunque algo de eso he visto.
Esto se debe a lo siguiente. Mi abuelo paterno sufría de una enfermedad (mal de chagas), se la controló con medicamentos por años, hasta que un 31 de Diciembre, dijo estar cansando de tomar pastillas, que ese día quería tomar y celebrar. Celebró, pero murió al dí siguiente, imagino que satisfecho. 3 meses después nací yo.
Tenía algunos años que no iba al cementerio, este año no falté, y siempre me sorprende que mucha gente vaya en este día, digo, casi todo el mundo está durmiendo o con ratón. También hace años recuerdo haber visto unas personas que parecían haber recibido el año allá, algo que no es común ver en ese cementerio en particular. Ni hablar de las tumbas con dulces, juguetes, e incluso cerveza, como la que ví esta vez.
Bueno, esta ha sido mi historia creepy del año.
Ya en esta fecha, lo que queda es limpiar la casa y guardar los cachivaches decembrinos, hasta este próximo diciembre, donde la historia se repite. Para los afortunados que no comienzan a trabajar el próximo 04 de enero, aprovechen los días libres.
Nunca lo había comentado acá, pero mi familia comienza el año de una manera particular. Luego de celebrar la llegada del año, joder y dormir un poco, vamos en la mañana al cementerio. No, no somos de los que recibimos el año allá, ni locos, aunque algo de eso he visto.
Esto se debe a lo siguiente. Mi abuelo paterno sufría de una enfermedad (mal de chagas), se la controló con medicamentos por años, hasta que un 31 de Diciembre, dijo estar cansando de tomar pastillas, que ese día quería tomar y celebrar. Celebró, pero murió al dí siguiente, imagino que satisfecho. 3 meses después nací yo.
Tenía algunos años que no iba al cementerio, este año no falté, y siempre me sorprende que mucha gente vaya en este día, digo, casi todo el mundo está durmiendo o con ratón. También hace años recuerdo haber visto unas personas que parecían haber recibido el año allá, algo que no es común ver en ese cementerio en particular. Ni hablar de las tumbas con dulces, juguetes, e incluso cerveza, como la que ví esta vez.
Bueno, esta ha sido mi historia creepy del año.